Representa una historia de resiliencia, autonomía y esperanza
Con información de Elvia Ochoa Gaona
Ciudad de México, Agencia de Noticias 3er Sector.- Gracias al Programa de Intervención Comunitaria Integral y Participativa (PICIP). Impulsado por la FUNDACIÓN ADO y la Fundación del Empresariado Yucateco (FEYAC), este programa ha transformado la realidad de la comunidad de Flamboyanes, ubicada en el estado de Yucatán, mediante el fortalecimiento de sus capacidades productivas, organizacionales y sociales.
Por lo que la comunidad ha dejado de ser una ciudad dormitorio para convertirse en un referente de autonomía y sostenibilidad.
Dentro del PICIP, la Finca Agroecológica ha jugado un papel clave. En 2015-2016, las familias de Flamboyanes tomaron la iniciativa de limpiar un terreno donado que inicialmente era monte para convertirlo en una unidad productiva. Este espacio se ha transformado en un centro de prácticas agroecológicas sostenibles, donde se siembran hortalizas, se cuidan gallinas ponedoras y se producen fertilizantes orgánicos. Gracias al excedente de alimentos generados, se ha conformado un modelo de economía local sostenible que contribuye al bienestar de las familias participantes.
El camino hacia la autonomía comunitaria.
Desde 2019, la finca opera de manera autónoma sin apoyo gubernamental directo. Sin embargo, el respaldo de jóvenes en prácticas profesionales ha sido fundamental para seguir impulsando el proyecto. Actualmente, cinco familias participan activamente, ofreciendo servicio a domicilio para abastecer de alimentos y fortaleciendo su modelo productivo.
Este modelo integral no solo ha fortalecido las capacidades productivas de la comunidad, sino que también ha impulsado regulaciones locales y garantizado derechos fundamentales como la educación. A través de alianzas con instituciones gubernamentales, se logró la construcción de una nueva escuela, la creación de un telebachillerato y la realización de registros civiles para niños que carecían de acta de nacimiento.
El enfoque participativo ha permitido que la comunidad se apropie de sus capacidades y se vuelva dueña de su propio desarrollo. La formación agropecuaria, financiera y organizacional ha sido fundamental para que el proyecto se convierta en un modelo sistematizado replicable en otras comunidades.
"Nuestro trabajo es impulsar la colaboración y generar alianzas que no dependan solo de nosotros, sino que permitan a las comunidades canalizar recursos de manera autónoma", destacó Cristóbal Fernández, representante de FEYAC. Este desafío permanente impulsa a la comunidad a sostenerse mediante iniciativas como campañas de fondeo colectivo y desayunos con causa.
Una alianza histórica
FUNDACIÓN ADO, aliado histórico de FEYAC, ha trabajado para garantizar la autonomía y sostenibilidad de estos proyectos. "Al final del día, el objetivo es que las comunidades se apropien de sus capacidades y se vuelvan dueñas de su propio desarrollo", señaló Andrés Pérez Peña.
Hoy, Flamboyanes representa una historia de resiliencia, autonomía y esperanza, un ejemplo vivo de cómo la colaboración y el compromiso comunitario pueden transformar vidas y construir un futuro sostenible.