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La Constitución es demasiado importante para dejarla en manos de abogados y políticos

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En los tiempos que corren quizá sea la mejor forma de hacerle frente al autoritarismo

Por Reyes Gamez

Monterrey, México, Agencia de Noticias 3er Sector.- En el libro La Constitución desconocida (Taurus), Juan Jesús Garza Onofre y Javier Martín Reyes señalan que la Constitución es demasiado importante para dejarla en manos de abogados y políticos. En ella se encuentran reconocidos los derechos de todas las personas, así como las reglas que nos hemos dado como sociedad, por lo que invitan a reflexionar a qué se debe que si nuestra Constitución fue la primera en reconocer derechos sociales —antes incluso que la rusa y la de Weimar, va tan rezagada en lo que toca a hacerlos efectivos.

Juan Jesús Garza Ochoa, dijo que lo que "busca este libro es llevar temas de derecho constitucional clásico a personas que quizá tienen una intuición o alguna idea respecto a la justicia o la democracia, pero por circunstancias de la vida, por la misma complejidad del derecho, por la cultura constitucional que existe en ese país, pues parecería que más bien se han permanecido ajenos. Entonces, lo que tratamos de hacer es eso, es hacer un libro con una vocación que tenga preponderantemente que cualquier persona interesada en estos temas pueda entrarle sin ningún miedo, sin ningún tipo de prevención.

Los autores que estarán presentando su libro el próximo 28 de septiembre a las 19 horas en la Feria Internacional del Libro Monterrey 2024, cuestionan si es: ¿es motivo de orgullo que tengamos la sexta constitución más extensa a nivel mundial?, ¿qué quiere decir el hecho de que nuestra Constitución, promulgada en 1917, lleve más de 700 reformas?, ¿esto nos habla de un texto versátil, que se adapta a los tiempos, o, por el contrario, es señal de inestabilidad y oportunismo político?

Garza Ochoa, señaló que que uno de los grandes problemas de la manera en cómo abordamos el derecho constitucional en México es que la constitución la vemos así como el último, el último botón que cuando ya todo ha fallado, no. Entonces, si nos vamos desentendiendo de la Constitución y nos vamos dejando guiar por la ley del más fuerte o la ley de la selva, pues en definitiva todos somos en menor o mayor medida, corresponsables de esta falta de respeto por lo que dice la Constitución.

¿Claramente hay algo de los legisladores de ese afán por incluir derechos tras derechos, no?

Siempre ponemos el ejemplo del artículo cuarto de la Constitución, deporte, alimentación, familia, igualdad, el artículo sexto, derecho al Internet con banda ancha. O sea, parecería que hay todo en la Constitución. Es un texto que se queda muy corto Dinamarca, si lo hablemos a la literalidad, y el problema es que los legisladores pues no terminan de aterrizar en la realidad. Creemos que ese es el principal problema de una clase política que se ha desentendido, que le sale muy barato cambiar la Constitución, pero no cambiar la realidad y si las personas ven que la realidad no cambia, pues se genera un círculo vicioso en donde todos somos, en menor o menor de día, responsables por no hacernos cargo de lo que dice propiamente el derecho y la Constitución".

En la Constitución se encuentran reconocidos los derechos de todas las personas, así como las reglas que nos hemos dado como sociedad. Por ello, debemos desmitificar la Constitución, dejar de verla como una reliquia ante la cual hay que inclinar la cabeza y más como un dispositivo útil para mejorar nuestra realidad cotidiana.

"Yo creo que lo hemos dicho ya muchas veces, nosotros estamos convencidos de que tanto la Constitución como el Derecho son demasiado importantes como para dejarlas en manos nada más de los políticos y de los abogados. Reconocemos que hay muchas causas por las cuales la gente no se siente cercana a la constitución, pero unas de ellas, tiene que ver también con la manera en la cual ha evolucionado nuestra constitución, por la manera en la cual las y los legisladores nos han dado la Constitución que hoy tenemos. Una constitución muy extensa, es la sexta más grande del mundo, una constitución que se reforma constantemente. Bajo algunas mediciones, es la más reformada que existe en la actualidad.

Entonces, claro, si una se quisiera apropiar, conocer incluso el contenido mínimo de la Constitución, la verdad es que es una tarea titánica, porque pues hay artículos que son muy sintéticos, de grandes principios, donde se establecen los grandes valores que deberían de ser nuestro piso común, las reglas del juego democrático y luego hay otros que tienen la forma de auténticos reglamentos. Ponemos siempre el ejemplo del artículo 41 constitucional. Cualquier persona que en este momento baje el PDF con la Constitución vigente, pues va a ver que el artículo 41 constitucional es realmente absurdo, no, regula hasta los minutos y los segundos que tendrán a su disposición partidos políticos, candidaturas y demás para poder acceder a radio y televisión.

Entonces pensamos que, bueno, quizá lo que había que hacer pues era un libro bastante más sintético, bastante más práctico, no en abogañol, que ese es el lenguaje espantoso que hablamos las personas abogadas, sino un lenguaje sencillo y pues realmente esa fue la inspiración, esa es la manera en la que nosotros pretendemos aportar un poco a resolver ese problema que es muy complejo. Eso también lo reconocemos abiertamente".

La Constitución desconocida, es un libro dividido en dos partes, teoría y práctica, aborda primero diez cuestiones esenciales de toda Constitución —como los derechos fundamentales, las formas de Estado y Gobierno, la división de poderes, el pluralismo—, para luego revisar cómo se han llevado a la práctica en el caso de la Constitución mexicana.

"La primera parte del libro es teoría y la teoría permanece. La teoría viene de mucho tiempo atrás y la teoría propiamente es algo que no, que los siglos se va modificando a cuentagotas y en la práctica es otra cosa totalmente", subrayó Garza IOnofre.

Sólo conociendo nuestra Constitución —nos dicen los autores—, reflexionando críticamente sobre sus virtudes y flaquezas, podremos apropiarnos de ella. En los tiempos que corren quizá sea la mejor forma de hacerle frente al autoritarismo, ya que la publicación del libro fue coincidente con el debate intento sobre la Reforma al Poder Judicial.

"Entonces, por más que en este momento sea todo muy difuso y las posibilidades sean más bien pocas, lo cierto es que esperamos que tarde que temprano salir de estos momentos de crisis jurídica y entender que si queremos mejor esto para todas las personas, de todos los colores, de todos los partidos, necesitamos empezar por reflejar en la Constitución esa pluralidad del país que es México", enfatizó Garza Onofre y aclaró que la publicación del libro con el debate que se daba en tonor a la Reforma del Poder Judicial, "no lo planeamos dejarlo claro, o sea, este libro lo llevamos pensando literalmente años, o sea, originalmente iba a ser un podcast y luego hicimos por ahí también algún curso breve para personas no abogadas.

Y lo que estamos viendo en estos momentos, pues quizás algunos nos han dicho llegan muy tarde, este libro llega muy tarde y la verdad es que siempre puede estar peor, y la verdad es que parecería que nunca es tarde para poner de moda y tratar de llamar la atención sobre un tema tan importante como es la propia vigencia de la Constitución. Entonces, lo que estamos viviendo hoy, a pesar de que es un tema totalmente inédito, es algo que no se había visto en la historia constitucional de México, del México reciente, creemos fundamental que si quizás todos nos hubiéramos hecho cargo de la Constitución, podríamos tener otro escenario o abrir otro tipo de conversaciones y de posibilidades, ahora ya donde parecería que hay una captura al Poder Judicial, donde la garantía de los derechos va a quedar al arbitrio propiamente de la popularidad de cada una de las personas juzgadoras, pues eso choca directamente con la teoría de la Constitución", dijo Garza Onofre.

Los autores mencionaron que el libro destacaron la redacción de la Constitución de 1917 en su momento no era tan inclusiva, pero algunas de las reformas han permitido garantizar los derechos humanos.

"Déjame ponerlo así como que es un libro que por un lado reconoce las cosas que están bien, incluso en términos del texto de la Constitución, vaya, no es menor que México con el paso de los años haya hecho reformas importantísimas, por ejemplo, la reforma en materia de derechos humanos de 2011.

Pero pues al mismo tiempo sí queremos ser, pues como que muy críticos con un texto que lo decimos y lo explicamos en el libro, pues fue redactado por un grupo muy reducido, muy poco plural de personas que vienen de la revolución, militares, abogados, es una Constitución que hay que decirlo, no fue creada así, mediante un procedimiento particularmente democrático e inclusivo.

Con el paso del tiempo, pues sí, efectivamente ha venido incorporando una serie de reformas que son muy importantes, pero son reformas que también se han quedado cortas, y eso lo decimos y lo reconocemos. Hay todavía muchos grupos que no necesariamente ven reflejadas sus demandas en la Constitución, en las normas secundarias, en las políticas públicas que tiene el Estado Mexicano.

Entonces sí hemos tratado como de no escribir un libro ni de alabanzas, ni tampoco con una visión catastrofista, al contrario, creo que lo que hemos tratado en todo momento pues es presentar una visión más ponderada de la Constitución, de los avances, pero también de sus limitantes", mencionó Martín Reyes.

Conforme se avanza en la lectura de La Constitución desconocida, los autores nos plantean que una vez que los derechos se encuentran en la Carta Magna, además se crean leyes secundarias, ahora es importante que se tengan los presupuestos que permitan que esos derechos sean ejercidos para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos, pero además deben tener una sostenibilidad financiera.

"Incluir derechos es muy fácil. Te ponía hace unos minutos el ejemplo del Internet de banda ancha, el derecho al deporte, el derecho a la alimentación sana, nutritiva y de calidad, entonces, este tipo de cosas, lo cierto es que puede que se queden solamente en la Constitución como idea y no lleven a la práctica si no discutimos de una manera más integral qué es lo que son los derechos. Los derechos implican actos de acción, de omisión, presupuesto público, legislación secundaria, personal sobre todo bien capacitado, organismos fuertes, una serie de cuestiones que parecería que nadie está hablando de ellas.

Es muy difícil llevar propiamente, aterrizar todas estas cuestiones en la cotidianidad de las personas y en ese sentido, es muy probable que si esto no funciona, simple y sencillamente pues sigamos en esa idea de creer que la Constitución todo lo puede, que con el solo hecho de ponerlo en la Constitución ya vamos a tener un mejor futuro.

Es el ejemplo de los programas sociales. Los programas sociales se constitucionalizaron durante este sexenio, me parece que fue una de las medallas que más echaron el presidente de la República, pero tú salía de mañana, el presupuesto público no va a dar para tener programas sociales y de esto servirá muy poco que la Constitución, lo que diga no se pueda garantizar por autoridades que obliguen a que lo que la Constitución diga realmente se lleve a la práctica", señaló Garza Onofre.

Al cuestionarles de si es necesaria una profesionalización de las personas que apoyan el trabajo de los legisladores, para así se tengan un mejor desempeño al momento de que presenten iniciativas o cuando se deben armonizar en los Congreso estatales las leyes, lo hagan en tiempo y forma.

Martín Reyes dijo que "lo primero que me llama poderosamente la atención es como explícita o implícitamente, no nos parece problemático o nos parece algo relativamente menor, como nos tomamos con ligereza el incumplimiento de la Constitución. Yo creo que si un Poder legislativo y personas legisladoras más responsables a las que les digan oigan, es que ustedes están incumpliendo, están incurriendo en una omisión, no están cumpliendo con su deber, con su obligación de legislar, pues yo creo que en un contexto diferente, lo primero que tendrá que generar es una enorme preocupación y lo que tendría que pensar es caray, estamos en falta y eso es preocupante, eso no sucede.

Y la otra que te diría también, pues creo que lo decimos en varias partes del libro, es importantísimo el tema de la profesionalización, y así como necesitamos un servicio civil de carrera en el Poder Judicial, que a nivel federal funciona relativamente bien, a nivel local hay de todo, Hay poderes judiciales que lo hacen muy bien, otros no tanto. Lo mismo deberíamos de ver tanto en el Ejecutivo y en el Legislativo.

Yo tengo la impresión de que en el Poder Legislativo y en el Ejecutivo, pues muchas veces ya lo sabemos cómo, cómo se otorgan esos espacios, cómo se dan esas contrataciones de las personas asesoras, funcionarias, jefas de departamento, subdirectores, directores, jefes de unidades, es decir, todas esas estructuras administrativas. La verdad, hay que reconocer que en general, por supuesto, no hemos sido particularmente buenos construyendo estos servicios profesionales. Creo que eso explica, por lo menos parcialmente, porque a veces la calidad de los productos legislativos no es tan buena. Creo que eso explica, al menos en parte, por qué se incurre tanto en omisiones legislativas.

Y lo que tú ya decías también, eso explica también por qué muchas veces, pues ahí está la reforma constitucional, si bien nos va, están las leyes secundarias y luego falta lo más importante, esas instituciones, procedimientos, políticas públicas, reglas de operación que nos permite y obviamente los presupuestos para financiar políticas públicas que tendrán que estar bien diseñadas, bien implementadas, bien evaluadas. Si no hacemos eso, pues entonces ahí sí va a continuar acrecentándose esa distancia que hay entre norma y realidad o entre teoría y práctica".