El libro será presentado en la Feria Internacional del Libro Monterrey 2022
Por Reyes Gamez
Monterrey, México (Agencia de Noticias 3er Sector).- Mónica Hernández en su novela La cofradía de las viudas (Martínez Roca) entrega a los lectores un trhiller histórico que permite conocer a las mujeres novohispanas que consiguieron con inteligencia y osadía superar las barreras de su género é iniciar la industria de la impresión.
Hernández dijo que le ha sorprendido que se piense que ella hizo “una novela feminista, yo nunca tuve intención, era hacer un homenaje a los libros, yo nunca quise hacer una novela feminista, sin embargo es imposible no hablar de este tema cuando han pasado tantos siglos y las cosas están igual”.
Durante la narrativa de la novela el lector puede asomarse como era la vida cotidiana en la Nueva España, donde la mujer tenía la responsabilidad de las labores del hogar, los hombres eran los proveedores, solamente la viudez era la única vía que permitía a las mujeres disponer de su dinero, su tiempo, su casa, por lo que los personajes de Gerónima de Gutierrez, viuda de Juan Pablos, así como Paula de Benavides, viuda de Calderón, logran mantener el monopolio de la impresión de cartillas, que es lo que usaban los religiosos para enseñar a leer a los naturales, a los niños y a las niños en los conventos, y también del secreto del Santo Oficio, que eran todos los documentos internos y oficiales
Hernández señaló que las mujeres en las que se basan sus personajes “si lo hicieron, si imprimieron como viudas de, una de ellas fue generación de 150 años de impresores, con la misoginia de la época, con los curas de la Inquisición encima, los libros prohibidos encima, tenia tienda de libros, ella imprimió para el secreto del Santo Oficio que eran los documentos internos, las sentencias, todas esas cosas oscuras”.
Destacó que solo unidas es como estas mujeres pudieron avanzar con sus imprentas, ya que no necesariamente tuvieron que ser amigas, pero lograron asociarse para beneficiarse todas.
El personaje de Paula de Benavides, viuda de Calderón, no solamente se encargaba de imprimir y tener una tienda de libros, sino que también le tocaba encargar para la Santa Inquisición los llamados libros prohibidos que se encontraban en el Índice.
Por lo que en la novela es que Paula, como cualquier persona, no puede vencer la curiosidad y lee esos párrafos de los libros que según la Santa Inquisición podía pervertir lo que le enseñaba la Iglesia Católica, lo cual va desencadenar diferentes situaciones.
La cofradía de las viudas también lleva a observar como desde hace cientos de años los hombres no les gustaba que una mujer fuera su jefa, actitudes, que dijo Hernández, siguen en la actualidad.
La autora agradece el recibimiento que los lectores han dado a su obra, pero ella espera aparezcan más novelas que visibilicen a las mujeres novohispanas que realizaron otros oficios.
La novela lleva a los lectores a recorrer las calles de la Nueva España, adentrarse a las tertulias donde nunca faltaba el chocolate, pero también conocer la cultura de esos momentos.
Hernández va estar presentando La cofradía de las viudas el domingo 9 de octubre a las 11 horas en la Feria Internacional del Libro Monterrey 2022.
