El activismo no solo es útil para compartir los hechos, sino para visibilizar la interacción colectiva.
Por Guillermo Jaramillo
Monterrey, México, UANL.- La Primavera Árabe egipcia acaba de cumplir 10 años de haber impulsado toda una revolución social en algunos países árabes, lo que trajo la caída de dictaduras en el poder, y tuvo como soporte el uso de la tecnología como principal medio de comunicación entre los ciudadanos.
Ante un mundo globalizado donde la cámara de un celular puede atestiguar hechos históricos y compartirlos casi de inmediato con el resto del planeta, el Director y fundador de SocialTIC, Juan Manuel Casanueva, participó en la “Semana Internacional de la Comunicación: alfabetización mediática y la transformación digital 2021”, organizada por la UANL en coordinación con la Facultad de Ciencias de la Comunicación, UNESCO, Red AMI México y el Consejo Consultivo Externo FCC-UANL.
“El activismo no solamente sirve para transmitir lo que está sucediendo, sino eventualmente articular elementos en tiempo real de visibilización y también de interacción colectiva con quienes nos siguen, o tengamos impacto o incidencia en los espacios sociales”, enfatizó Casanueva, cuyo título de ponencia fue “El uso de la tecnología digital para el cambio social”.
La información en la era de la revolución digital
A finales del 2010, Túnez sería el país donde la revolución social daría inicio. Un vendedor ambulante se prendería fuego protestando contra lo que consideraba un abuso policial, generando un “efecto dominó” de protestas.
Después, la Plaza Tahrir fue el escenario del movimiento social que derrocaría la dictadura egipcia de 30 años en el poder de Hosni Mubarak. Pronto la Libia de Gadafi y la Siria de Al Assad también se unirían a la revuelta.
Los periodistas, indicó Casanueva, deben observar cómo logran incidir o impactar en distintos grupos sociales o con quienes toman decisiones, de múltiples maneras a través de un tiempo.
“El activismo digital debe estar basado en información, pero tiene una gama de aspectos comunicacionales que seguramente ustedes identifican mejor que nosotros.
“Cuando cambiamos este paradigma nos hacemos más eficientes para poder lograr objetivos como cambiar, incidir o mover a las personas que queremos mover”, explicó el director de SocialTIC.
Identifica tus objetivos
Casanueva recomendó identificar objetivos de acción social, mismos que deben contar con claridad y particularidad específica.
“Qué es lo que queremos lograr con esa persona a la que le estamos mandando un twitt o un video, o a la que queremos que visite nuestra página ¿queremos que se dé cuenta de algo? ¿Que quiera algo? ¿Participe? ¿Que se involucre, denuncie o vaya a la marcha? ¿Que se exprese de tal o cual manera para que el movimiento sea más grande? Al contar con claridad sobre este tipo de objetivos, la selección de las plataformas no sólo va a ser mucho más fácil, sino que vamos a poder utilizar tácticas adecuadas para lo mismo”, detalló.
Casanueva compartió una imagen a la audiencia para explicar el objetivo de la acción social:
¿Qué queremos?
Posicionar – Informar – Sensibilizar – Movilizar – Involucrar.
Finalmente, el especialista resaltó que el objetivo no debe confundirse con la plataforma utilizada, sino que el objetivo siempre será informar claro y preciso, por lo que recomendó hacer uso de distintas estrategias relacionadas con el marketing y publicidad digital.