Charlan sobre sus influencias y el proceso creativo del libro que publica la editorial de la UANL
Por Ángeles Serna
Monterrey, México, UANL.- La infancia es una etapa llena de imaginación y cuestionamientos que se relacionan con la vida adulta, pero en la que también existen sentimientos que afectan la visión del entorno.
Dicha situación es la que logran plasmar la escritora Erika Zepeda y la ilustradora Natalia Gurovich en el primer libro álbum que publica la Editorial Universitaria de la UANL.
Se trata de el libro de los secretos verdes, obra que mezcla el lenguaje verbal con el visual y que, de acuerdo con Gurovich, resulta un formato que reta a los lectores.
Durante la presentación del libro, Sandra N. de la Riva, promotora cultural, destacó el tratamiento de la soledad en los niños protagonistas de la historia: Valentina y José.
Refirió que el tema es relevante e interesante para lectores de cualquier edad, ya que se pueden sentir identificados con algunas situaciones que transcurren en el libro; incluso invitó a la reflexión y al desarrollo de la imaginación a partir de las situaciones retratadas.
Los secretos de la creación
Erika Zepeda mantuvo contacto con el público a través de una transmisión en línea de la presentación de su obra El libro de los secretos verdes, en la que contó su experiencia con la escritura de este su primer libro álbum, además del proceso de edición y su publicación.
La autora dijo que siempre había tenido la inquietud de escribir sobre las puestas secretas, los secretos y la soledad en la infancia. Incluso aludió que ella era de esas niñas que fantaseaban con encontrar pasadizos secretos y llegar a otro mundo.
Asimismo destacó que dentro de su proceso creativo necesitó de varias lecturas, por lo que la construcción del libro fue a raíz del tiempo y la lectura.
Conexión con la parte mágica
La ilustradora Natalia Gurovich habló sobre el procedimiento que la llevó a crear las ilustraciones para el libro álbum, además de mencionar sus influencias para las imágenes que acompañan las historias de Valentina y José.
Dijo también que su arte estaba basado en los cuadros de René Magritte al momento de plasmar en su trabajo dimensiones mezcladas y que para El libro de los secretos verdes se valió del papel calca o grabado para lograr las imágenes que buscaba para la publicación.
