Por Mercedes López/ Agencia Informativa Conacyt
Ciudad de México.- Originalidad, metodología, calidad e impacto de la investigación fueron los puntos evaluados por un jurado calificador para otorgar el Premio Lola e Igo Flisser-PUIS, para el fomento a la investigación en parasitología, a la tesis doctoral Determinación de la respuesta inflamatoria asociada al tratamiento de la neurocisticercosis subaracnoidea: implicaciones patogénicas y terapéuticas de la neuróloga Graciela Agar Cárdenas Hernández.
La investigación se realizó en el Laboratorio de Inmunología del Instituto de Investigaciones Biomédicas de la Universidad Nacional Autónoma de México (IIBO UNAM), bajo la tutoría de la doctora Agnès Odile Fleury.
En entrevista para la Agencia Informativa Conacyt, la investigadora explicó que su trabajo de tesis consistió en la identificación de marcadores moleculares inflamatorios asociados al tratamiento en enfermos con cisticercosis subaracnoidea. “Debido a las implicaciones en la respuesta al tratamiento, en este contexto, es importante hacer hincapié que existen enfermos que, a pesar de dosis adecuadas de fármacos cisticidas, persisten con parásitos vesiculares, lo cual subsecuentemente se relaciona con complicaciones vasculares e hidrocefalia”.
“El panorama actual de la cisticercosis es alarmante porque sigue siendo una enfermedad altamente endémica, básicamente nuestro país y la mayor parte de América Latina, de acuerdo con estadísticas de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la enfermedad es endémica”.
El premio es patrocinado por la familia Flisser y el Programa Universitario de Investigación en Salud (PUIS) de la Coordinación de la Investigación Científica de la UNAM.
Se otorga anualmente a la tesis de doctorado más sobresaliente en el área de parasitología.
La neurocisticercosis es producida por la invasión del sistema nervioso central por la larva del parásito Taenia solium, la cual causa una tercera parte de los casos de epilepsia en adultos a nivel mundial, más de 80 por ciento de la población afectada por epilepsia a nivel mundial vive en áreas endémicas de cisticercosis.
Pobreza y falta de higiene factores para que la enfermedad persista
En México, existen diferentes estudios epidemiológicos en neurocisticercosis (serológicos y de autopsia) que revelan una prevalencia de cinco a 11 por ciento a nivel nacional (dependiendo si están en zonas de focos “rojos”: Chiapas, Guerrero, Michoacán, el bajío y Yucatán). A nivel clínico, esta enfermedad es responsable de 11 por ciento de los casos de consulta neurológica, de 25 por ciento de las craniectomías, pero sobre todo es la primera causa de epilepsia en el adulto.
De acuerdo con la integrante nivel II del Sistema Nacional de Investigadores (SNI), los factores para que esta enfermedad persista son la pobreza y las condiciones de poca higiene, lo que provoca que el ciclo de vida del parásito sea persistente. En efecto, el ciclo biológico de este parásito requiere de dos hospederos: el ser humano que alberga a nivel intestinal el parásito adulto (tenia o solitaria) y el cerdo que es el intermediario, el cual adquiere la infección (por el estado larvario) a nivel de tejido musculoesquelético o cerebral al consumir materia fecal humana que contiene los huevos del parásito. El ser humano también puede adquirir esta forma larvaria, a través de alimentos o agua contaminada con los huevos del parásito.
Para evaluar su pregunta de investigación, se utilizó la metodología de microarreglos para valorar la expresión génica en pacientes con neurocisticercosis antes y después de tratamiento cisticida. En este contexto, se observó una expresión génica diferencial entre pacientes respondedores y no respondedores a tratamiento de cerca de 190 genes, pero solo 18 relacionados con respuesta inmunológica fueron evaluados, entre estos se encontraron genes proinflamatorios, antiinflamatorios e inmunomodulatorios, siendo notable la presencia de tres genes relacionados con respuesta Th17 (RORγC, SLAMF6 y RUNX3), los cuales estaban sobreexpresados en pacientes respondedores al tratamiento, mientras que en los no respondedores predominaron genes antiinflamatorios (TGFβ, TNFRSF25, TGFB2, SLAMF1).
“Estos resultados iniciales fueron confirmados a través de la búsqueda de proteínas (interleucinas de perfiles Th1, Th2, Th17) a nivel central (LCR) y periférico (sobrenadante de células de sangre periférica). En los pacientes respondedores, se encontraron niveles mayores de IL17AF en LCR y de IL-6 en sobrenadante, mientras que los no respondedores tuvieron mayores niveles de TGFβ en LCR e IL-10 en sobrenadante. Estos resultados indican que la respuesta inmunológica inflamatoria es determinante para que el tratamiento cisticida sea eficaz en la eliminación de los parásitos”.
En América, la neurocisticercosis representa una carga de 31 mil 390 casos anuales, ocasionando 182 mil 726 años de vida perdidos ajustados por discapacidad, constituyéndose como la primera causa entre los 31 riesgos reportados en 2015 para la región de las Américas por enfermedades transmitidas por alimentos (PAHO/OMS, Informe Primera Reunión Regional sobre control de Taenia solium en América Latina. Colombia, 2015. Artículo de Internet).
En México, aunque en los últimos 16 años los casos de teniasis han disminuido considerablemente, el país continúa siendo una zona de alta endemicidad para neurocisticercosis. El grupo con la mayor incidencia fue de uno a cuatro años, con una tasa de 0.3 por cada 100 mil. Los estados con mayor incidencia son Chiapas (1.32), Colima (0.67) y Yucatán (0.64). En 2016, se reportaron 110 casos de cisticercosis, prevaleciendo en los estados de Chihuahua y Jalisco (SUIVE/DGE/SSA/Estados Unidos Mexicanos).
30 años del galardón
En su trigésima edición, el Premio Lola e Igo Flisser-PUIS es convocado por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), a través del Programa Universitario de Investigación en Salud, que invita a los egresados de doctorado en el campo de la investigación científica relacionado con el área de la parasitología a concursar por este premio.
El objetivo del premio es fomentar, reconocer y promover en los estudiantes de doctorado el interés por dirigir sus talentos a la investigación en parasitología. Este honra la memoria de los señores Lola e Igo Flisser y se otorga anualmente a nivel nacional.
“La premiación del trabajo académico siempre es un estímulo importante para investigadores y profesores consolidados. Frecuentemente la importancia de los premios catapulta el inicio de la carrera de una joven investigadora”, señaló el doctor José Manuel Saniger Blesa, investigador del Centro de Ciencias Aplicadas y Desarrollo Tecnológico (CCADET) de la UNAM.
Dijo que los premios y los programas de las instituciones de salud dan la importancia de orientar la investigación biomédica hacia la frontera y un impacto social en nuestro entorno.
En la edición 2017, se recibió un total de 15 tesis doctorales de diferentes instituciones del país, tales como el Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav) del Instituto Politécnico Nacional (IPN), de la Escuela Nacional de Ciencias Biológicas del IPN, entre otras.
Por su parte, originaria de Villahermosa, Tabasco, la investigadora dijo que este tipo de reconocimientos es una gran honra para el trabajo de tesis doctoral y que es muy importante el fomento que se hace para los investigadores jóvenes para incentivar el camino de la investigación científica. La galardonada también enfatizó que “es muy importante que todos los días nuestras actividades estén encaminadas a contribuir con el engrandecimiento del país, aun las pequeñas acciones del día son importantes, ya que las grandes contribuciones son la suma de todos los esfuerzos, de las acciones del día a día”.