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Désirée Clary se encuentra en el epicentro del ascenso y caída de un imperio

Opinión
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Una novela arrolladora sobre la mujer extraordinaria que conquistó el corazón de Napoleón

Por Reyes Ramiro Gamez Barboza

Monterrey, México (Agencia de Noticias 3er Sector).- En la novela El destino de una Reina (Planeta) de Allison Pataki, su autora nos lleva a conocer la historia de Désirée Clary, la reina del siglo XIX que estableció la dinastía que todavía gobierna Suecia en la actualidad.

Durante el transcurso de la novela vamos conociendo la increíble vida de una mujer casi perdida en la historia, una mujer que, a pesar de las maravillas de una vida deslumbrante y una época tumultuosa, no solo se adapta y sobrevive sino que, en última instancia, reina en el timón de una dinastía que dura más que un imperio.

Désirée, que nació en 1777, era la hija de un comerciante en Francia y conoció a Napoleón cuando su hermano, José, se casó con su hermana, Julia, en 1794. Los dos se enamoraron y se comprometieron. Pero Napoleón lo rompió después de conocer a otra mujer, Josefina, con quien finalmente se casó en 1796, convirtiéndola en emperatriz.

La suerte de Désirée cambia una vez más cuando conoce al confidente y general estrella de Napoleón, el indomable Jean-Baptiste Bernadotte.

A medida que los dos hombres en la vida de Désirée se convierten en rivales políticos y enemigos militares, la pregunta que surge es: ¿debe elegir entre el amor de su nuevo esposo y el amor de su nación y su Emperador?

Desde las lujosas propiedades de la Riviera francesa hasta las estridentes calles de París y Estocolmo, Desiree se encuentra en el epicentro del ascenso y caída de un imperio, navegando por una constelación de gigantes políticos y peligrosas y cambiantes alianzas. Al emerger de una chica impresionable a una joven feroz, descubre que para sobrevivir en este mundo debe aprender a confiar en sus instintos y su corazón.