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Abren las puertas del Soccer Camp a niños de escasos recursos

Inclusión Social
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En total, se ofrecieron 10 becas a través de Hagamos La Diferencia, cuya fundadora es exalumna de la UDEM.

San Pedro Garza García, Nuevo León.- Luego de que el año pasado un niño –participante de Hagamos La Diferencia– fue beneficiario de una alianza entre esa asociación y el Soccer Camp UDEM – FCB Escola, este año el campamento deportivo blaugrana en la Universidad de Monterrey dispuso 10 becas para niños de escasos recursos.

 

Al término de la primera semana de entrenamiento en la UDEM, nueve de estos menores becados recibieron sus constancias y el décimo desarrollará su curso la próxima semana, en las canchas de futbol de la UDEM.

Hagamos La Diferencia –que continúa con la labor de impulsar acciones que van en contra de la deserción escolar de jóvenes y niños– detectó a niños destacados en el balompié, bajo la guía de Marisol González, fundadora y presidenta del organismo, y ExaUDEM becaria del programa Formar para Transformar.

Lo anterior se debió a la influencia del trabajo de la asociación en la colonia Los Pinos, en San Pedro Garza García, y en la zona del Cerro de la Campana, en Monterrey, en alianza con Cemex en esta zona específica.

Marisol González explicó que este año la Fundación de la Escola ofreció al principio una beca, pero al ver que se podía ampliar la ayuda, en colaboración con Cataluña Sports, otorgó más recursos al Soccer Camp, por lo que el número de beneficiados aumentó.

“En total tenemos 10 becas; esta semana estuvieron nueve niños y la próxima semana estará uno más. Se seleccionaron a través de torneos, se vio a quienes destacaron más en el futbol, se les preguntó a sus familias si podían acompañarlos para llevarlos y traerlos y ya en sus colonias, se hizo la entrega simbólica de las becas.

“El año pasado, cuando becaron a un niño, fue muy trascendente para su familia y para él, porque le abrió la posibilidad de que se puede aspirar a más y ver que en el deporte haya una forma de entretenimiento, principalmente, pero también de formación”, relató.

En Hagamos La Diferencia a través del deporte, explicó González, lo que se busca es disminuir la deserción escolar, de ahí que, al aprovechar el apoyo del campamento deportivo representa una oportunidad para los pequeños de afianzar valores como la disciplina y el trabajo en equipo.

“Cuando el niño becado el año pasado regresó a su colonia y platicó sus experiencias, motivó a otros niños”, mencionó, “lo que es para nosotros una satisfacción muy grande, porque esta semana del campamento amplía horizontes a los niños y eso es lo que queremos, que vean que hay algo más allá de su colonia o de los problemas que puedan tener dentro de sus casas”.

Para ser beneficiario del campamento, aclaró, también se debe ser un niño, de entre ocho y 14 años de edad con buen aprovechamiento académico, no solo buen deportista.

“Los planes de vida de los muchachos se construyen con oportunidades, porque podemos ir a motivarlos y decirles que le echen ganas, pero si no hay una oportunidad (como esta del Soccer Camp), la verdad es bien difícil que verdaderamente puedan salir adelante, si no hay una motivación”, señaló.

Hagamos La Diferencia tiene ya tres años de trabajo en Los Pinos; mientras que en el Cerro de la Campana se aprovechó la labor social de Cemex en dicho polígono, para seleccionar a algunos niños.

Hagamos La Diferencia tiene tres áreas de influencia en su actuar como organización; están la del desarrollo humano, el desarrollo de vida y carrera, y el desarrollo comunitario, todas ellas operando en su trabajo con los niños y jóvenes con la intención para que no dejen de estudiar y continúen con el propósito de elevar su calidad de vida.

“En estas tres áreas tenemos que encontrar el pretexto en las colonias o en las escuelas en las que trabajamos, esto para ganar la confianza de los chavos, y estas pueden ser a través del deporte, el arte o las conferencias”, mencionó la exbecaria del programa Formar para Transformar.

En su labor, la organización encuentra el apoyo de voluntarios, jóvenes de servicio social de la UDEM y otras asociaciones civiles, sin dejar la relación con el programa Formar para Transformar.